17 septiembre 2010
Exhibición aérea en Cádiz.
Por tercer año, los ases del aire han visitado las playas de Cádiz para darnos una muestra de sus proezas, al mando de unos aparatos que luchan por liberarse de la atracción de la gravedad.
Pudimos contemplar a la PAPEA, la patrulla de paracaidistas especilizados del ejército del aire, una de las mejores del planeta.
Los aviones a hélice nos sorprendieron con piruetas imposibles tan sólo al alcance de pilotos con muchas horas de vuelo.
Tampoco faltaron a su cita los helicópteros, que nos ofrecieron un salvamento simulado que nos hizo bañarnos más tranquilos, sabiendo que ellos estaban pendientes de nosotros.
El estruendo llegó de la mano de los aviones a reacción, como el F-15 y el Harrier, cuyo sonido atronador podía ser oído desde todo Cádiz. No quiero imaginarme lo que deben sentir los soldados enemigos cuando ven llegar estos aviones hasta el campo de batalla. Debe ser una sensación terrible. Espero que sólo sean empleados en exhibiciones de aquí en adelante.
Un hidroavión venido de Málaga nos mostró el modo en que combaten los incendios forestales, quedando patente la pericia del piloto para cargar su bodega con toneladas de agua, que no tardaba en descargar dejando tras de sí una lluvia refrescante.
Un espectáculo digno de ser visto.
Coco
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