Los fieles de este Blog ya sabéis que lo publiqué antes de la final, y es posible que muchos no creyéseis en Paul, pero... ¡Somos campeones del mundo!
Tantas injusticias perpetradas contra nuestra selección nacional en tantos mundiales han sido borradas por el éxito de unos jugadores que han llevado el gusto por el buen fútbol por bandera.
Mientras otros equipos se forman en torno a una estrella mediática, como Messi, Ronaldo, Kaká, Roonie, etc., España contaba con dos equipos titulares, uno en el campo de juego, y otro sentado en el banquillo, guiados por un entrenador que acertó con todos los cambios realizados.
Gracias a esta victoria se nos ha quitado la tontería de no poder sacar nuestra bandera, y se ha demostrado que los nacionalistas son una minoría. No tiene nada de malo sacar la Senyera mientras se viste la camiseta nacional, como tampoco lo tiene que Pedrito se cubriese con la bandera de Canarias, o el Guaje Villa utilizase la bandera azul de Asturias a modo de capa.
Es cierto que España ha triunfado en muchos otros deportes, como el ciclismo, tenis, baloncesto, Water Polo, balonmano, etc., pero era lógico que fuese el que consideramos como deporte nacional el que nos ayudase a todos a decir adios a todos nuestros complejos.
Ahora son los habitantes de otros países los que visten nuestra camiseta, quienes muestran carteles referentes a nuestros jugadores, y quienes nos admiran, y por qué no decirlo, ¡nos envidian por ser españoles!
Sólo ocho naciones lo han conseguido, sólo ocho países han alcanzado lo más alto en el mundo del fútbol, y como ya os anuncié en mi blog, ahora formamos parte de ellos. Pero es más, hemos entrado por la puerta grande, jugando como nadie, y haciendo lo que ninguna otra selección puede soñar siquiera con imitar, porque les falta la materia prima, una que se alimenta a base de jamón ibérico y langostinos de Sanlúcar.
Reconozcámoslo: somos inimitables. ¿Qué otro país sacaría a Manolo Escobar en la fiesta de celebración? La visión de Manolo siendo manteado se me quedó grabada en la retina, y la veo cada vez que cierro los ojos. Spain is diferent, dicen por ahí, y qué razón tienen, pero yo no me cambio de país por nada del mundo, y menos ahora que somos... ¡Campeones del mundo!
Coco.
